Hemos regresado hace menos de dos semanas de nuestro viaje a Zambia y llevamos aún todo un mundo de sensaciones, colores, sonidos, luz, silencio dentro de nosotros. Nuestra estancia en Delia Camp formará siempre parte de nuestros recuerdos. Hemos vivido en un documental de televisión. Ramón, Víctor y todo el resto del equipo nos han tratado con esmero y cariño, atendiendo en todo momento nuestras inquietudes. Gracias por vuestro trabajo. Si queréis disfrutar del África salvaje, real, exclusiva, de la amabilidad de sus gentes y de una estancia inolvidable os recomendamos este lugar. No lo olvidaréis.
Al hotel le falta alguna comodidad que otra.Sí que es verdad que no es fácil tener un alojamiento en perfectas condiciones en un lugar tan remoto y tan especial a la vez. Creo de verdad que ,a pesar de tener algunas incomodidades,merece la pena ir hasta alli.El lugar es precioso,en medio del parque ,sin nadie alrededor...solo el rio Luangwa en frente, con el sonido de los hipopótamos ,las hienas etc...Los Gerentes (Ramon y Victor ), nos lo pusieron todo muy facil, Intentando agradar en todo lo posible. la comida sencilla pero muy rica. Los Rangers unos profesionales...aprendimos mucho sobre el comportamiento de los animales, las plantas etc...Volveriamos mañana sin duda
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